Nunca pensé que una banalidad como esta me causaría tanto conflicto. Un conflicto entre mi sentido común... mi lógica y los arrebatos del corazón. Es sólo una página de internet. Claro, no una cualquiera. Una página donde podía estar al tanto, día a día, de cómo está, de lo que hace o deja de hacer, de sus nuevos gustos o disgustos... pero también, a través de este intruso portal podía ver sus nuevas fotos, sus juntas, sus videos cantando canciones y esa risa que antes tanto amé y que ahora veo cómo sigue riendo sin mi.
Sí, lo eliminé de facebook... es una tontera. Odio no poder saber de él, no enterarme al instante de sus nuevas juntas y las cosas que hace o no. Pero será mejor para mi "sanidad mental". La lógica me dice que sí, pero esa psicópata que todos llevamos dentro, aún grita desesperada queriendo morbosamente ver cosas que sé que no quiero ver.
Uy! por qué nadie me advirtió que esto sería tan difícil? :(
